lunes, 25 de octubre de 2010

Mi mundo




No concibo vida sin amor,
sin tu amor.

No existe beso alguno,
si no son tus labios sobre los míos.

No percibo caricia más,
que tu piel fundiéndose con la mía.

No escucho otro susurro,
que el que salga de tu alma.

Porque cuando estoy contigo nada existe,
todo forma parte de un sueño,
un sueño en el que no puedo estar triste
y del que solo tu eres dueño.

Escápate conmigo a un lugar
donde cada día sea especial,
donde solo existan lagrimas de felicidad.

Te amo para siempre. María.

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